Renting de Coches Híbridos

Como ya sabrás, existen 4 formas de pagar un coche: al contado, financiado, a través de un leasing o… por medio de un renting, la alternativa de moda de los últimos años (a continuación veremos por qué).

Ahora bien, ¿cómo funciona el renting? Basicamente, se trata de un contrato de alquiler a largo plazo (generalmente dura de 2 a 5 años), que permite a las personas disfrutar de un coche a cambio de una cuota mensual fija, sin la necesidad de pagar una elevada cantidad inicial. En este sentido, no es necesario pagar una entrada, aunque puedes hacerlo y pagar una cuota mensual inferior.

Por otro lado, con relación a los vehículos híbridos, el renting es la forma idonea de disfrutar de un modelo cuyo motor es más eficiente que el de los vehículos convencionales, que cuenta con la etiqueta ECO de la DGT (lo que ofrece muchas ventajas) y cuya contaminación sonora es nula. Y, por otro lado, los coches híbridos son perfectos para circular por ciudad, ya que maximizan su rendimiento.

Y, para termina, destacamos que este tipo de vehículos se convertirá, junto con el renting de coches eléctricos, en la alternativa dominante dentro del sector automoción.

Apostar por el renting de coches híbrido es una de las alternativas más inteligentes, especialmente para aquellos que quieran circular por ciudad. Las principales ventajas que ofrecen este tipo de coches son:

• Más respetuosos con el medioambiente.
• Consumen menos (por ciudad. No los recomendamos para trayectos muy largos, como viajes).
• Tienen ventajas fiscales, lo que abarata el precio del renting.
• El panel de control te enseña a conducir de manera eficiente.
• Perfectos para maximizar el rendimiento en entornos urbanos.
• La contaminación sonora es nula.
• En algunas ciudades puedes circular por el Bus VAO, incluso si solo hay un ocupante en el coche.

Por otro lado, no podemos olvidar todas las ventajas asociadas a contratar un renting con nosotros:

• Seguro a todo riesgo está incluido.
• Mantenimiento preventivo mecánico completo (cubre frente a siniestros y robo).
• Asistencia en carretera.
• Reparación en caso de avería.
• Vehículo de susticución.
• Servicio de reclamación de multas hasta agotar la vía administrativa.
• Gestión de todas las labores administrativas (desde la compra del vehículo).
• Cambio de neumáticos (consultar).
• Y, como ya hemos comentado, no tienes que desembolsar una cuota inicial. Además, esta cuota mensual es fija.

Como acabamos de explicarte, alquilar un coche de renting híbrido supone multitud de ventajas como los que acabamos de ver. De ahí que, como hemos señalado, esta sea una alternativa cada vez más popular.

Sin embargo, el renting de eléctricos tiene también algunas desventajas. Y, desde Pug Renting queremos que conozcas todas ellas. Veámoslas:

• Cancelar el contrato conlleva una penalización. Si, por ejemplo, contratas un coche de renting (que no deja de ser un alquiler) durante 3 años, y, por el motivo que sea, decides cancelar este servicio, deberás pagar una penalización.
• No eres el propietario del vehículo. Por el contrario, pertenece a la compañía de renting con la que lleves a cabo la operación. Por lo tanto, no puedes modificar aspectos del vehículo. Y, por supuesto, tienes que mantenerlo en buenas condiciones (aunque para eso tienes el seguro a todo riesgo incluido).
• Ya hemos mencionado como las reparaciones están incluidas. Dicho esto, debes tener en cuenta que estas deberás realizarlas en los talleres marcados por la compañía. No obstante, seguramente haya reparaciones ubicadas cerca de tu residencia.
• No puedes configurar el coche a tu gusto (a priori). No obstante, si deseas un modelo en particular, con unas prestaciones específicas, siempre se puede pedir el coche al fábrica. No obstante, el precio de la cuota mensual será considerablemente más elevado, por lo que en este caso sí recomendamos la compra o financiación del vehículo, en lugar de optar por un coche de renting.
• Y, en el caso de los coches híbrido de renting, el precio de estos suele ser más elevado que el de otras alternativas como el diésel o la gasolina.

Adicionalmente, en algunos casos la entrega del vehículo puede demorarse incluso 3 o 4 meses (aunque esto no es exclusivo de los modelos eléctricos).